cómo montar una franquicia

Si la pausa estival te ha dado el impulso definitivo que necesitabas para por fin lanzarte a la aventura empresarial, ser tu propio jefe y abrir tu propio negocio, queremos darte la enhorabuena. Eso sí, también queremos que tengas muy claro cuáles son los aspectos clave que has de tener en cuenta antes de embarcarte en esa nueva etapa. Te explicamos cómo montar una franquicia.

Permítenos que en esta ocasión nos centremos en cuáles serían esos aspectos si en lugar de crear un negocio de la nada tu apuesta pasase por unirte a una red franquiciadora. Atent@ porque en las siguientes líneas te explicamos todo lo que debes saber sobre cómo montar una franquicia.

Cómo montar una franquicia: por dónde empezar

Haz bien tus cálculos: ¿De cuánto dinero dispones?

Lo primero que debes pensar cuando abordes el tema de cómo montar una franquicia es en la inversión que estás dispuest@ a hacer. No se trata de soñar sino de hacer muy bien los cálculos para saber de qué suma estás hablando y, en función de esa cantidad, optar por una u otra franquicia.

Apuesta por la coherencia y ten muy en cuenta cuáles son tus ahorros, cuál es tu capacidad de endeudamiento y cuál podría ser tu respaldo económico, dicho de otra forma, de dónde podrías obtener financiación. No te dejes llevar por ‘recetas milagro’ ni por falsas expectativas. El éxito de tu negocio consiste en que tu business plan sea realista y como dice el refranero popular ‘no vender la piel del oso antes de cazarlo’.

Buscar financiación

Para lograrlo, una de las cosas que has de tener muy, muy, pero que muy claras cuando analices cómo montar una franquicia es -en el caso de que lo necesites porque no dispongas del dinero en efectivo para hacer tu inversión- quién podría prestarte la cantidad que te hiciera falta para empezar sin quedarte a cero y así evitar una sensación nada agradable de ahogo económico.

En la lista de opciones figura pedir un préstamo a una entidad financiera, sobre todo ahora que hay muchas que tienen ‘paquetes especiales’ para emprendedores, o recurrir a la financiación pública que han puesto en marcha algunas Comunidades Autónomas en los últimos tiempos para precisamente reforzar el emprendimiento.

Hagas lo que hagas recuerda que tu plan de acción a la hora de establecer cómo montar una franquicia ha de contemplar en cuánto tiempo máximo podrías recuperar la inversión y a partir de qué momento tu negocio podría ser rentable. No te olvides de los sueldos aproximados que tendrías que pagar ni de los gastos fijos que vas a acumular para que las cuentas te cuadren.

Acierta con la elección

Hecho todo lo anterior, toca elegir y elegir bien a la hora de determinar cómo montar una franquicia. ¿Sabes cómo? Pues teniendo en cuenta unas cuantas variables que te detallamos a continuación.

Apuesta por una red franquiciadora con la que te sientas identificad@ en lo que respecta a sus valores y principios. Lo mejor es que además de eso, la marca por la que te decidas se englobe en un sector de actividad que te guste, motive, inspire… ¿¡Cuántas veces has escuchado eso de que trabajar en lo que te gusta no es trabajo!? ¡¡Pues eso!!

Piensa que ese sector ha de tener tirón en el presente y proyección para el futuro. No sirve de nada que te subas al carro de algo que está muy de moda pero que no viene para quedarse. ¿Cómo saberlo? La mayoría de las veces basta con aplicar el sentido común. No obstante, para evitar caer en un posible error, lo que te recomendamos es que apuestes por entrar en una red franquiciadora que ya haya sido probada y tenga éxito.

Fíate de tus ojos y tus oídos

Y no sólo eso, sino que hables con algun@ de sus franquiciad@s para que te cuenten cómo les va y les ha ido con la matriz, qué tipo de formación reciben, con qué apoyos cuentan a nivel de marketing, comunicación, asesoramiento… Su experiencia y su versión te interesa. No te quedes con lo que te cuente la central. Ve más allá y comprueba por ti mism@ que además de buenas cifras la red cuenta con una buena atmósfera y un buen entendimiento entre franquiciador y franquiciados.

Empápate también del perfil del público con el que tendrías que tratar y de quiénes serían tus principales competidores, por qué y en qué. Eso también es importante para que sepas qué tipo de dinámica de trabajo vas a tener que llevar tanto tu sol@, en calidad de franquiciado, como de forma colectiva, de la mano de la central.

Y no firmes sin saber lo que significa cada cláusula del contrato de franquicia. No valen luego ni los ‘creiques’ ni los ‘penseques’. Lo que se firma firmado está. Y si decides ser franquiciad@ tendrás que cumplir con las exigencias legales y jurídicas que te exija la administración -licencias, permisos, auditorías…-, y los requisitos que te pida tu matriz franquiciadora.

Comunica, hazte ver, date a conocer

Una cosa más. A la hora de pensar en cómo montar una franquicia, no dejes de lado el poder de la comunicación y el marketing ni el de las redes sociales. La forma en la que vas a darte a conocer ante tus potenciales clientes es pieza clave para alcanzar el éxito, diferenciarte de tu competencia, captar constantemente adeptos a tu marca y fidelizar clientes. Si no sabes cómo hacerlo, confía en alguien experto en la materia.

Sólo nos queda ya pedirte que disfrutes de cada etapa de tu camino y no quieras crecer muy rápido. Dar pasos en falso pueden comprometer la viabilidad a medio o largo plazo de tu proyecto.

Si estás pensando en abrir una franquicia, te ayudamos.

¡Mucha suerte y a por todas!